Lavanda Lavandula angustifolia
Es una planta herbácea perenne y sumamente fragante.
Se utiliza en perfumería, en medicina natural como antitusivo, como calmante contra los dolores de cabeza.
Nombres populares: lavanda, Lavanda, Lavandula, Nardo.
Suelo: Prefiere un suelo enriquecido, bien drenado, ligero y lugares soleados.
Nombres comunes: lavanda inglesa, lavanda de jardín, lavanda común, lavanda de hojas estrechas
Nombre latino: Lavandula angustifolia
Origen de la especie: Mediterráneo
Tipo: Polinización abierta, Tradicional, Temporada cálida
Ciclo de vida: perenne
Método de plantación: trasplante
Luz solar: pleno sol
Alto: 60 cm
Color: rosa, morado
Temporada de floración: florece a fines del verano, florece a principios del otoño
Usos: atrae polinizadores, atrae abejas, atrae mariposas, aromático
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Siembra: Refrigere las semillas de lavanda durante un mes antes de plantar. Plantéelos superficialmente en un suelo que drene bien y manténgalos a una temperatura de 16 a 19 grados C. Mantenga el suelo húmedo con una botella rociadora para evitar el riego excesivo y protéjalos del sol mas intenso. La germinación puede tardar hasta un mes y las plantas alcanzarán un tamaño adecuado para el trasplante en aproximadamente 6 meses; el trasplante puede tener lugar a finales de la primavera o en el otoño. Transplantelos a macetas más grandes con el mayor cuidado posible para evitar alterar las raíces. Las plantas de lavanda prefieren pleno sol y suelo que drene bien, incluso suelo rocoso o arenoso. Plantéelos a 60-80 cm de distancia en filas de 75-100 cm de distancia para dejar suficiente espacio para el crecimiento. Con un manejo adecuado, las semillas de lavanda pueden crecer en contenedores; la lavanda también es un excelente seto que atrae pájaros, abejas y mariposas y repele ciervos y conejos.
Crecimiento: la cantidad adecuada de humedad es crucial para las plantas jóvenes de lavanda. Demasiada agua es mortal, pero hasta que se establezcan necesitan un suelo bastante húmedo. Las plantas maduras pueden tolerar condiciones de sequía, pero no deben deshidratarse. Cubrir las plantas con grava o conchas pequeñas puede ser útil para absorber el calor y controlar las malas hierbas; al ser una planta mediterránea, la lavanda ama los suelos rocosos. En el primer año de crecimiento de la planta, la poda de las flores que aparecen le ayudará a desarrollar raíces y follaje sanos. Las plantas maduras también se benefician de una poda cuidadosa anual.
Cosecha: El mejor momento para cosechar lavanda es por la mañana después de que el rocío se haya secado. Para secar, coseche los tallos con unos pocos cogollos abiertos; en esta etapa, los aceites fragantes han alcanzado su punto máximo. Para uso fresco, coseche los tallos con más cogollos abiertos. Seque los manojos de lavanda boca abajo en un lugar fresco y oscuro durante una semana o más; para salvar los brotes, quítelos de los tallos.
Como conservar las semillas: a fines del verano, las flores se marchitarán y las semillas comenzarán a desarrollarse. Retire los tallos individualmente a medida que comienzan a secarse y las semillas maduran, y extiéndalos para terminar de secarse lejos de la luz solar directa. Trillarlos para quitarles la semilla. Guarde la semilla en un lugar fresco y seco.
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Tip: Si decide cultivar lavanda en maceta no debe mezclarse con otras plantas.
