Agapanthus orientalis Blanco
Planta perenne de crecimiento moderadamente rápido, puede alcanzar los 60 a 70 cm de altura.
Es una variedad vigorosa y de larga floración que forma hojas de color verde, anchas, arqueadas con una textura que contrasta con los arbustos y las plantas perennes de hojas anchas, atraen mariposas y abejas.
Son una opción ideal para bordes y también aptas para macetas.
Tolera las condiciones en la costa y una variedad de tipos de suelo siempre que tengan buen drenaje. Capaz de sobrevivir con poca agua una vez establecida, se logra una planta más robusta con el riego regular en una exposición solar total o parcial.
El agapanto es una planta que requiere buena intensidad de luz. Si nos encontramos en una región muy calurosa debemos situarla en zonas de sombra parcial, ya que una exposición directa puede quemar las hojas. En cuanto a las temperaturas frías, es muy rústica y soporta heladas de 10 a 15º C bajo cero.
No requiere mucha agua. Se puede mantener el suelo húmedo regando 2 o 3 veces por semana, dependiendo del calor o frío que haga. Durante la floración hay que aumentar el riego con el objetivo de prolongar la producción de flores, coincidiendo con las altas temperaturas de verano.
Un método que beneficia al agapanto es trabajar el terreno alrededor de la planta en verano. Se conservará mucho más la humedad en el suelo y mantendrá la planta hidratada en todo momento hasta que llegue el siguiente riego.
Florece desde verano hasta principios de otoño, con la llegada del frío, por lo que nos aseguramos una floración durante varios meses.
El agapanto es una planta que requiere buena intensidad de luz. Si nos encontramos en una región muy calurosa debemos situarla en zonas de sombra parcial, ya que una exposición directa puede quemar las hojas. En cuanto a las temperaturas frías, es muy rústica y soporta heladas de 10 a 15º C bajo cero.
No requiere mucha agua. Se puede mantener el suelo húmedo regando 2 o 3 veces por semana, dependiendo del calor o frío que haga. Durante la floración hay que aumentar el riego con el objetivo de prolongar la producción de flores, coincidiendo con las altas temperaturas de verano.
Un método que beneficia al agapanto es trabajar el terreno alrededor de la planta en verano. Se conservará mucho más la humedad en el suelo y mantendrá la planta hidratada en todo momento hasta que llegue el siguiente riego.
Florece desde verano hasta principios de otoño, con la llegada del frío, por lo que nos aseguramos una floración durante varios meses.
